Hoy día existe una gran cantidad de trastornos digestivos que se extienden por todo el mundo, atacando a personas adultas y niños, o muchas veces, a una determinada parte de la población más que a otra. En esta oportunidad te vamos a hablar de la enfermedad celíaca, que puede ser más común de lo que piensas y que, según varios estudios, afecta al 1% de los países occidentales y en España a 1 de cada 71 niños y 1 de cada 357 adultos.
¿De qué se trata la enfermedad celíaca?
Podemos definir esta enfermedad como aquella que afecta al sistema inmunitario, o enfermedad digestiva que daña de manera principal al intestino delgado. Esta afección impide, o complica, la absorción de las vitaminas, nutrientes y minerales necesarios que se encuentran en los alimentos que ingerimos.
Al no absorber los nutrientes como es debido, provoca malnutrición en la mayoría de los pacientes que la sufren aún teniendo buena ingesta.
Para que esto no suceda, los celíacos deben evitar comer alimentos con gluten tales como la avena, trigo, cebada o centeno, ya que éstos dañan su intestino delgado. Cuando una persona ingiere alguno de estos productos, el sistema inmune actúa y entonces se generan daños en la mucosa del intestino.
Este trastorno puede afectar a diferentes tipos de poblaciones pudiendo presentar una gran cantidad de síntomas variados, los cuales no tienen por qué ser los mismos en cada persona. Y por ello, es imprescindible efectuar ciertos estudios para determinar si se padece o no de celiaquía. Asimismo, existe un componente genético, y esto hace que sea más común que aparezca en ciertas familias.
¿Qué síntomas se presenta con la enfermedad celíaca?
Cuando hablamos de los posibles síntomas de esta intolerancia, puede que te venga a la mente solamente aquellos que están estrechamente ligados a lo digestivo. Una de las cualidades de la enfermedad celíaca es que podemos tener muchos tipos de síntomas, entre los cuales los siguientes:
- Dolor en el abdomen
- Náuseas y vómito
- Estreñimiento
- Heces de contextura blanda, con mal olor, de un tamaño grande y grasosas
- Diarrea crónica
- Muchos gases
- Provocar intolerancia a la lactosa
- Agotamiento
- En caso de los niños retraso del crecimiento
- Calambres musculares
- Puede presentar pérdida de peso
- Dolor en las articulaciones y óseos
Por mucho tiempo se creyó que esta enfermedad atacaba de manera mucho más común a los niños, pero ahora sabemos que puede aparecer a cualquier edad. En cuanto a la etapa infantil, se pueden manifestar las siguientes señales:
- Daño en el esmalte de los dientes
- Cambios en cuanto a su estado de ánimo como, por ejemplo, molestia o impaciencia
- Desarrollo lento, esto quiere decir que su estatura y peso no van acorde a su edad
- Retraso de la pubertad
- Niño muy delgado
También pueden surgir otros signos que terminan afectando diversas partes de nuestro cuerpo. En caso de tener dicha sintomatología, no dudes en acudir a un especialista:
- Fatiga y mucho cansancio
- Dermatitis herpetiforme
- Boca reseca, lengua roja, lisa y brillante
- Dolor de cabeza muy constante, convulsiones, neuropatía periférica
- Depresión y ansiedad
- En cuanto a mujeres, puede que se presenten infertilidad, irregularidad de los ciclos menstruales y abortos espontáneos, y en cuanto a los hombres, infertilidad masculina
En cuanto a las señales como la poca estatura y el daño al esmalte de los dientes, dependiendo de la edad del individuo, puede que no mejoren. En personas que padecen de celiaquía pero que no tienen ningún síntoma, si no recibe el tratamiento adecuado, podría tener algunas complicaciones.
Causas de la celiaquía
Son muy pocas las investigaciones capaces de demostrar las causas precisas de la enfermedad celíaca. Hasta ahora, se dice que se genera en aquellas personas, que poseen unos genes específicos, cuando ingieren alimentos con gluten. Aun así, los expertos continúan investigando otros posibles factores que también podrían provocar este trastorno, así como algunas bacterias.
Haciendo hincapié en la causa genética, se ha visto que, comúnmente, se presenta en aquellas personas con un grupo de variantes genéticas normales. Este grupo lo conocemos como DQ8 y DQ2, ocupando un 30% entre todas las personas.
De ese 30% de individuos que poseen el grupo de variantes genéticas DQ8 y DQ2, un 3% la sufren. Igualmente, los expertos en la materia, siguen estudiando si otros genes tienen la posibilidad de desarrollar la enfermedad celíaca.
En cuanto al gluten, yendo de la mano con lo genético, hace que aquellas personas, con dichas variantes, al consumir alimentos que contienen gluten, generen una reacción anormal del sistema digestivo. Es importante mencionar, que no todos aquellos que pertenecen a este grupo genético y consumen gluten, desarrollan esta enfermedad.
Diagnóstico de la enfermedad celíaca
Para poder dar un diagnóstico de esta enfermedad, los especialistas pueden optar por varios métodos. Principalmente, utilizan la información del historial clínico del paciente, es decir, la recopilación de todas las dolencias o sucesos que le hayan ocurrido hasta el momento, pudiendo incluir los antecedentes de sus familiares y antecesores.
El médico también puede realizar otro tipo de exámenes físicos de los que vamos a hablar a continuación:
Antecedentes familiares o historia clínica
Además de preguntar al paciente por los síntomas, el doctor accede y revisa el historial médico de la persona. También formula una serie de preguntas sobre los antecedentes médicos de sus familiares más cercanos como mamá, papá, abuelos o tíos. Es indispensable saber si alguno de ellos ha sufrido de la celiaquía.
Estudio físico
El médico también realiza un examen físico del paciente para poder indagar un poco más en profundidad. Entre esas exploraciones físicas más comunes, están las siguientes:
- Con la ayuda de un estetoscopio, el especialista escucha en el abdomen, los sonidos internos dentro de la zona.
- Examina cuidadosamente la piel, para así observar si el paciente sufre de erupciones como es el caso de la dermatitis herpetiforme.
- Para ver si hay algún tipo de dolor o inflamación, el médico da leves golpes o toques en el abdomen.
- En caso de ser un niño, también presta especial atención a si hay algún tipo de dificultad con el crecimiento, y en adultos (y también niños), se observa si existe mucho adelgazamiento.
- Por otro lado, tanto el médico como el dentista, pueden ver a detalle si existen problemas con el esmalte de los dientes, ya que éste también es una posible señal de enfermedad celíaca.
De ser necesario, el doctor también puede optar por efectuar otro tipo de análisis como exámenes de sangre o biopsias. Como puedes observar, existen muchas maneras para poder tener un diagnóstico de la celiaquía.
¿Cómo tratar la enfermedad celíaca?
El único tratamiento para la enfermedad celíaca es restringiéndose de comer cualquier tipo de alimento que tenga gluten. No importa el tamaño de la ración o la frecuencia del consumo, si quieres ver una mejoría o curarte, tienes que suspender estos alimentos de por vida, sí o sí.
La mejor manera de conseguirlo, es acudiendo a un especialista que pueda establecerte una dieta correcta y equilibrada, además de un seguimiento para asegurarse de que lo estás cumpliendo adecuadamente. Entonces, es ahí cuando se notarán las mejoras. Si es tu caso, sé paciente, ten en cuenta que es posible que la recuperación no sea instantánea y probablemente sea necesario un plazo aproximado de 1 a 2 años para que puedas estar completamente sano.